lunes, 12 de diciembre de 2011

Qué bello es vivir en el campo.....

    Los gallos cantan al amanecer....desde las seis de la mañana hasta las dos de la tarde aproximadamente.
    Los pajarillos entonan sus trinos....desde el más tenue tintineo hasta el grito más afónico. Uno incluso llega a reconocer los cantos, alaridos y berridos.  
    Los perros ladrando al fondo...al fondo y casi debajo de tu almohada.
    La lluvia golpeando los cristales...y las persianas, y el tejado....como si te empujase hacia el más oscuro abismo.
    La hierba creciendo en el jardín...tanto que te pegas unas palizas de impresión para mantenerla a raya.
    Y a partir de la primavera....los animalillos recuperan su trono....serpientes, lagartijas, lagartos...que encuentras en los más insospechados rincones.
    Vuelves a casa serpenteando la montaña...y un jabalí casi se topa con la parte delantera de tu coche.

    Maravilloso sí........

    Qué bello es vivir en el campo....donde Internet se evapora cuando más lo necesitas y te deja sin escribir en el blog casi un mes......

    En el fondo, comprendo que los pájaros griten con rabia, que los jabalíes te amenacen con su presencia y que la lluvia golpee la casa sin pudor. Nos hemos entrometido en su reino, en sus dominios. Y somos nosotros los que debemos adaptarnos a ellos.
    La naturaleza nos cede su belleza, su inocencia cristalina, su pureza primigenia. A cambio, tenemos que comprender la fina ironía con la que a veces nos trata.

    Y mañana, el gallo incansable volverá a cantar desde las seis hasta las dos,  que es lo que dura un amanecer en el campo......

martes, 15 de noviembre de 2011

Confío

   No sé cómo hemos llegado a este punto pero nos hemos cargado la belleza humilde.

    La gente ya no ve los colores infinitos que nos ofrece un día cualquiera, y sin embargo nos hemos inventado cabinas de cromoterapia. No sé si se puede ser más hipócrita.

    A la mayoría jamás se les ocurriría descalzarse un martes o un lunes... y sentir los guijarros que nos regala un río. Eso sí, hemos inventado el negocio de las piedras sobre la piel, que te relajan los músculos hasta el punto de perder la cordura.

    Miro hacia atrás y no sé cuándo ni cómo hemos llegado a esta farsa tan curiosa, por decir algo. Lo que sí sé es que hemos llegado demasiado rápido. Nos hemos dado mucha prisa en dejar de escuchar el sonido inmenso del silencio, y crear todo un imperio en torno a cds que renegocian "sonidos de la naturaleza".

    Lo peor es que si continuamos así, probablemente llegue un punto en que no sabremos ya ni dónde estamos. Quizá porque ni siquiera nos importe. Pero creo que todavía estamos a tiempo, creo que la esencia tiene más poder que el artificio. Confío en que la sencillez no permita jamás su autodestrucción. Y confío en todos nosotros, que aún temblamos cuando amanece.

                                     ************************************

    Hoy hace un mes que te fuiste, Iago.  No sé qué decir....Sin ti... la vida se hace eterna.

sábado, 12 de noviembre de 2011

.......delfines y otros.....

    Sinceramente, me cuesta mucho no escribir sobre Iaguito pero el blog...y la vida, lenta muy lenta, sigue.
    Y aquí estoy yo, frente a frente con mi cara que presiento que cada vez está más demacrada. Y digo presiento porque yo, personalmente no me miro al espejo, pero ya se encargan ciertas almas bondadosas de describir mi estado físico sin dejarse ni un detalle. Lo triste es que se les escapan los detalles internos, vaya hombre.... esos no son descriptibles, esos son sólo criticables.

     Y cambiando de tercio, como diría uno de esos de cuya profesión no quiero acordarme, hoy voy a hablar de los delfines. Por qué? Pues porque forman parte del título de mi blog y porque mi hijo sabe pronunciar peces a duras penas, pero delfín, lo pronuncia a la perfección. Evidentemente, con 18 meses ya sabe él que es un mamífero y no un pez.

    Uno de mis pequeños y nada pretenciosos sueños ha sido siempre nadar entre delfines. Pero debe ser que ese poco pretencioso deseo se ha convertido en el de miles, con lo que ha pasado de ser una inmersión mágica a un negocio en toda regla. ¿Por qué se nos ocurrirá expresar en alto nuestros deseos? Siempre hay una empresa aquí o allí que lo recoge y lo convierte en un negocio lucrativo de la noche a la mañana.
  Total, que a ver cómo consigo yo enfundarme el traje de neopreno, acercarme a un delfín, sin un monitor que le dé continuas explicaciones al pobre animal. Pues ya veremos cómo lo consigo, pero no tengo intención de abandonar este mundo sin acariciar la piel juguetona e huidiza de un animal al que me encantaría parecerme, eso sí, en libertad
  .

jueves, 10 de noviembre de 2011

Sirenas bajo la ducha

    Cuando era pequeña, tenía la firme creencia de que debajo de la bañera se encontraba el fondo del mar. Hasta tal punto llegaba mi teoría, que solía sumergirme y notar el cosquilleo de los peces de colores en las plantas de mis pies.
    Creo que la culpa de todo esto la tenía un anuncio de gel o champú, ya no recuerdo. La mujer se daba un sugerente baño de espuma y al dejar resbalar su cuerpo dentro de la bañera, miles de peces y corales la rodeaban.
    Con el tiempo descubrí que no sólo no se encuentra bajo mi cuerpo el fondo marino sino que es mucho más recomendable ducharse. Pobres pececillos de colores, anémonas y erizos...pero no podemos derrochar .....

    Ahora, cuando me ducho, me da la impresión de que lo que hallo bajo el agua es el fondo de mis pensamientos. Y esto no me lo ha inculcado ningún anuncio, ni mucho menos. Por eso me siento dulcificada cuando caen las gotas sobre mis hombros. Escurro los brazos a la vez que escurre el agua y me rindo a la paz que me ofrece tan bendito momento.

     Durante segundos, me siento sirena, no por la cola de escamas ni por la exuberante melena sobre mi torso. Me siento sirena por el autohechizo de mis cantos, de mis reflexivas melodías. La paradoja del mito, caer presa de tu propia magia.

     Y así soy yo, que convierto una simple ducha cotidiana en una especie de catársis universal.

martes, 8 de noviembre de 2011

Me siento profundamente injusta

     Llevo días sin saber de qué hablar, asi que mucho menos sé sobre qué escribir...
    Hoy ha llovido, así que tengo los huesos ateridos. Observo a la gente bajo sus paraguas y me doy cuenta de que apenas fijan la mirada en nada. Creo que se nos está escapando la humanidad, la estamos dejando huir entre el tráfico y las luces de cruce.
    Hago un esfuerzo por formar parte de conversaciones anodinas. Y lo hago. Profiero un par de idioteces y prosigo mi camino cabizbaja.
    En el fondo, no son las conversaciones triviales lo que me molestan. Lo que me duele es que la gente se sienta con derecho a extraer conclusiones y juicios sobre mi vida, sólo basándose en ese par de idioteces que has dicho para no pecar de maleducada.
    Siempre he pensado que quien te quiere y te conoce no necesita explicaciones. Cuando tienes que dar explicaciones, mal asunto.... Y ahora mismo he caído en la cuenta de que cada vez te absorben más, cada vez exigen más tus entrañas en bandeja y que cuando por fin consiguen ese tan preciado don de tus pesares, entonces lo ponen a la venta al mejor postor.
    Y mañana supongo que volverá a llover, y soplará el viento. Pero no conseguirá arrastrar el dolor. Ése, sigue aquí, conmigo. Y quiero que siga. Lo que no quiero es que los demás lo utilicen para convertirse en jueces sin toga.
    ¿Y a mí qué más me da? Por lo menos, todo esto ha servido para darme cuenta de quién exige explicaciones y quién escucha sin más. 

  Y mientras..............sigo sin encontrar el tesoro.

viernes, 21 de octubre de 2011

Encuéntrame un tesoro

    El Sábado, 15 de Octubre fue uno de los días más tristes de mi vida. El sábado pasado se murió Iago, un alumno mío de diez años. No creo que nadie esté preparado para recibir una noticia de este tipo.

    El viernes estuvo en clase, como siempre. Se marchó contento porque casi había terminado todos los deberes, y me despidió con una sonrisa de satisfacción.
    Al día siguiente terminó lo que le quedaba y, como premio, sus padres le dejaron conducir el buggy por el jardín. No entro en detalles porque sobran y no importan en absoluto. Iago se nos fue.....

    No he sabido asimilar la tragedia. No he sabido todavía.

    Iago era un niño espectacular. Con unos ojos azules profundos y una mirada llena de agradecimiento. Me enseñó que en la vida uno no se puede rendir. Me enseñó que las dificultades no nublan la sonrisa.
    Iago tenía dislexia. Nunca le vi un mal gesto, una mala cara, por tardar casi tres horas en completar su trabajo. Tenía que dedicar el doble que el resto de los niños y, sin embargo, sonreía y se sentía tan orgulloso al terminar....

    Yo sólo sé que con Iago se me ha ido un trozo de mi alma. Todavía le veo llegar en bicicleta, esperar con la mochila, leer cada día mejor.... Era portero de un equipo de fútbol, quería ser albañil y era un crack esquiando. Idolatraba a sus padres y le brillaban los ojos aún más cuando hablaba de ellos.

    El viernes 14 me dejó un libro: "No entiendo nada, Natalia. Pero nada de nada". Yo le dije: "No te preocupes que yo te ayudo a hacer resúmenes capítulo a capítulo". Y me he quedado con el libro....no se lo he podido devolver. ¿Y qué más da que no lo entendiera? No se lo he podido devolver.

    Encuéntrame un tesoro. Así se titula. Me temo, Iago, que el tesoro eras tú. Y ahora sólo nos queda encontrarte en cada recuerdo, en cada rincón que has dejado tan vacío....................

    Te quiero mucho, Iago, mucho, mucho.

   

viernes, 7 de octubre de 2011

Surrealismo en estado puro

    Hasta hace poco creí que el Surrealismo era un movimiento cultural de Vanguardia, de finales del siglo XIX. Estaba confundida.
    El Surrealismo es ir hablando con alguien por la calle y que, de repente, desaparezca porque se ha caído en una alcantarilla. la persona que va contigo no sabe si reír a carcajadas o pedir ayuda desconsoladamente.
    Surrealista es ir a entrar en el metro y que se te cuele una pierna entre vagón y andén. Uno siente una especie de cosquilleo entre miedo y vergüenza.
    Surrealista es que tires un dardo intentando dar al centro de la diana y que el dardo se te quede en posición vertical, ahí, enganchado como si nada. Todo el mundo alucina y tú piensas que no has conseguido atinar donde querías.
     Surrealismo puro es que vayas andando tranquilamente por tu casa con un bastoncillo en la mano, lo tires con descuido a la basura y encaje directamente en la pequeña abertura de un tetra-brick de leche.
     Surrealismo es que uno vaya corriendo por la calle y se choque de bruces con una señal de tráfico, hasta tal punto que debas generar historietas que sirvan como justificación al tremendo chichón que te ha salido en la frente.
    Surrealista es que salgas a la calle con un calcetín sí y uno no. No es suficiente con salir con uno de cada color, no. Es mucho más surrealista olvidar que tienes dos pies.
    ¿y por qué entiendo yo tanto de situaciones surrealistas? Pues porque todas, sin excepción, me han sucedido a mí. Y me dejo bastantes....

    Por supuesto que es mucho más interesante el movimiento vanguardista pero...hoy necesitaba reírme de mí misma.

miércoles, 5 de octubre de 2011

Posteritati

    ¿Por qué aspectos quiero que se me recuerde tras mi muerte? ¿Deseo que me recuerden por quien fui, por lo que hice? Y si es así, ¿estoy de verdad viviendo una vida digna de recordar?.
    Cuando llene el espacio de ausencia...¿qué echaran de menos los que realmente me conocen?

    Fui una persona alegre, aunque en ocasiones perdí el norte de mi risa. Lloré en la misma proporción que hice resonar mi carcajada. Fui incoherente, absurda, en ocasiones contradictoria. Habrá quien recuerde mis desatinos, mis tropiezos...que fueron quizá demasiados.
    Provoqué el llanto ajeno...lo cual lamento profundamente. Intenté sanar a quien dañé, pero no siempre pude.

    Aventurera inconsciente, insatisfecha en mi búsqueda...me guié siempre a través de los impulsos de mi corazón. Infancia despierta, adolescencia rebelde, juventud quebrada...madurez colmada de sueños y sosiego.
 
   Habrá quien me recuerde por mis calcetines de colores, por el pelo despeinado, los bajos rotos de los pantalones, mis pijamas estampados. Por mis manías, mis reflexiones, mis cómicas teorías...qué sé yo...

    Pero deseo permanecer en la memoria por mi sonrisa y el brillo de mis ojos. Sé que forman parte de mí pero a veces danzo sobre aristas y se escurren sin dejar rastro. Si mañana, o pasado mañana...o dentro de diez días, diez años o cincuenta....me alejara entre la bruma, quisiera que mi sonrisa no viajara conmigo. Quisiera que fuera huésped sedentario en los corazones de quien amo.

   Y no pido más, ése será mi humilde legado.


    

domingo, 2 de octubre de 2011

Hogar, dulce hogar

    Desde pequeños, entendemos que algún día tendremos una casa propia.

    Recuerdo que jugaba con mis amigas y un papelito. Después de marear aquel papel doblado, por fin, te señalaba tu futuro: Te vas a casar a los 25, con un chico que se llama Roberto. Vas a tener cuatro hijos y viviréis en una cabaña de madera en Suiza (por ejemplo ) Nada más lejos de la realidad, pero menos mal... porque...¿qué hago yo con cuatro criaturas de un tal Roberto, correteando en una cabaña de madera? Y en Suiza!!
    Si algo de todo eso se ha cumplido, amigas de la infancia estarán viviendo en áticos en Nueva York, en palacios en Francia, y en tiendas de campaña en África...
    En mi caso concreto , la realidad ha superado con creces al vaticinio de aquel juego infantil. Por supuesto no en el número de hijos...( de momento ) ni en el nombre del marido. Y mi casa tampoco es de madera ni está en Suiza, pero es la casa más bonita del mundo (como diría yo misma de pequeña ).

    Siempre supe que viviría en un lugar en contacto con la naturaleza. Supe que la casa sería la excusa para un entorno tan poderoso que la hiciera insignificante. Y así es.
    Cuando me despierto, me golpean las copas de los árboles y el movimiento ondulante del campo. Y no mucho más allá, el agua del río discurriendo veloz hacia su desembocadura. Montes, casas desperdigadas, árboles frutales... un regalo para los sentidos.
    El interior no es más que el fruto de nuestras ilusiones y nuestro divagar de ideas. Criticable en el estilo, personal en el gusto...rezuma noches de desvelo. Colección de sensaciones. 
    Ante todo, nuestra casa somos nosotros. Y no pretendemos más que sentarnos en el sofá con la certeza de que hemos creado nuestro rincón en el mundo.

Y no tiene nada que ver, pero ya que estoy, añado otra imagen de mi casa, que para eso la hemos diseñado nosotros!!!

      :

jueves, 29 de septiembre de 2011

Otoño de castañas y calabaza


  Me fascina el otoño. Me apasiona su color a miel, grosella y chocolate  ; su sabor a calabaza y castaña;  su aroma a lluvia lejana. Es capaz de robarle protagonismo al sol, de restarle importancia a los pétalos, de mudar la tez de la gente.
    El otoño es la estación de la nostalgia, de la mirada perdida en algún lugar, del alma suspendida... Supongo que te devuelve a la realidad pero a la vez te envuelve de poesía.
    Es el momento del declive estival. Y en los momentos de declive, uno siente más que nunca que posee el poder de la resurrección. Te recuerda la exigencia de renovarte sin descanso.
    Emerges al alba con la piel salpicada de escarcha tibia. Observas la calidez de los árboles desnudos. Y te provoca un sentimiento de añoranza tan bello que no deseas otro horizonte para tus ojos.

    En otoño, el espíritu tiembla. Se sabe vulnerable frente al viento, el frío y la lluvia. Se confiesa cobarde ante la ausencia de luz intensa y de colores. Y yo, prefiero un espíritu que duda y cuestiona, que no se siente engreído. Nunca me he fiado de los momentos de efusividad que regala la primavera. Me parece tan inmensa esa decadencia otoñal que no anuncia final...

    Me muevo en una especie de baile somnoliento. Me paseo con sosiego. Me acuno entre la realidad y la fantasía. Y al final del día, un breve escalofrío recorre mi piel, invitándome al crepitar del fuego.

    Vendrán nuevos otoños, y con ellos, el meditar del alma vagabunda. Y yo seguiré adorando esta estación que me apacigua con sus tonos ocres y la mudanza de la brisa.....

domingo, 25 de septiembre de 2011

La elegancia del erizo

    Uno de los grandes momentos de este verano, grandioso... ha sido descubrir La elegancia del erizo. Más allá de los ingentes sistemas filosóficos, del poder deslumbrante de la sabiduría...se encuentra el placer de saborear los instantes. Las camelias, el musgo, el color de los montes de Japón... el té de jazmín, las sensaciones frente al arte...

    Vivimos en una sociedad en la que, como machos de la manada, cada cual trata de marcar territorio. Te topas continuamente con personas que quieren demostrar al mundo lo que tienen, lo que saben, lo que son... Se levantan cada mañana y atraviesan su pasarela luciendo cada día un diseño, un tejido brillante, un taconeo atronador... Es una eterna fashion week donde el fasto es directamente proporcional al valor. Entonces comienza una verborrea incontinente donde se profieren todo tipo de autohalagos:  yo he leído..., yo he viajado a..., yo he estudiado y trabajado en..., tengo una casa en...  Inacabable tormento. Mientras, el  backstage se va quedando vacío, polvoriento y sin espectadores. Pero es allí, entre bambalinas, donde reside toda la magia, el aroma esencial de la vida.

    Entre tanto discurso agotador, hemos perdido la capacidad de disfrutar de los cambios de estación. Se nos ha escurrido entre las manos el olor de nuestra piel y de la ajena. Nos atormenta la lluvia y no respiramos su tacto.

    Las dos protagonistas de La elegancia del erizo, Renée y Paloma, permanecen entre bambalinas y desde allí le devuelven al mundo el poder de los pequeños detalles. Ambas se elevan sobre un suelo cultural envidiable, fundamental. Y desde la humildad del sabio cotidiano, nos regalan esas difusas pinceladas que, muchas veces, la grandeza del saber, pasa por alto.

   " ¿Para qué sirve estudiar?", me preguntan muchas veces mis alumnos. Porque gracias a la poesía, la filosofía, el arte, la música... no perdemos ni uno sólo de los matices de la vida y no necesitamos demostrarle nada a nadie.

Nos falta tiempo.....

    Un día le dices que apenas si queda tiempo para estar a su lado. Cuarenta, cincuenta años...no son suficientes. Y te buscaré más allá, flotando en la neblina. No tendrás cuerpo...pero sabré que eres tú. Nuestras almas se reconocerán, y se unirán de nuevo. Ese es el consuelo que me queda frente a este mundo finito, caduco.
    Y lo siento de verdad. No es puro y denso sentimiento prosaico. Con obviedad, no es intrascendencia adolescente. Ni siquiera es rayo fugaz de feliz instante.
    Siento que estaremos unidos siempre...y necesito creerlo. Este mundo no es suficiente porque se agotan las palabras y las miradas en ocasiones se pierden.
    Te buscaré, te lo prometo. No como objetivo ni propósito. Te buscaré porque es innato en mi. Allí, donde sea que el tiempo no se define como tal, te encontraré y seremos universales. o, simplemente seremos. Como ahora, pero sin espera de decadencia.


    Donde habite el olvido, 
En los vastos jardines sin aurora; 
Donde yo sólo sea 
Memoria de una piedra sepultada entre ortigas 
Sobre la cual el viento escapa a sus insomnios. 

Donde mi nombre deje 
Al cuerpo que designa en brazos de los siglos, 
Donde el deseo no exista. 

En esa gran región donde el amor, ángel terrible, 
No esconda como acero 
En mi pecho su ala, 
Sonriendo lleno de gracia aérea mientras crece el tormento. 

Allí donde termine este afán que exige un dueño a imagen suya, 
Sometiendo a otra vida su vida, 
Sin más horizonte que otros ojos frente a frente. 

Donde penas y dichas no sean más que nombres, 
Cielo y tierra nativos en torno de un recuerdo; 
Donde al fin quede libre sin saberlo yo mismo, 
Disuelto en niebla, ausencia, 
Ausencia leve como carne de niño. 

Allá, allá lejos; 
Donde habite el olvido.


    Donde habite el olvido, Luis Cernuda.

domingo, 24 de julio de 2011

Atardeceres



  ¿Por qué nos produce esa sensación de sosiego una puesta de sol? Es el único ocaso que nos resucita.
    Otros ocasos nos producen escalofríos y, sin embargo, los atardeceres con su divina aflicción, nos devuelven a la vida.

    Tener la certeza de que existe un mañana tras el fin,  de que el sol que hoy se apaga, nos anuncie un eterno retorno. Al ser humano ese tipo de seguridad le produce calma, melancolía y poder.

    A veces caminamos tan rápido que nuestros propios pasos nos devoran y al llegar el preludio nocturno, no nos detenemos a observar la sinfonía de colores y sonidos mudos. Deberíamos coleccionar atardeceres en nuestra retina para no desprendernos nunca de la grandeza de sabernos minúsculos ante tanta belleza.

 

martes, 19 de julio de 2011

Las canciones infantiles

   " En un vagón cargado de sandías, el buen Ramón perdió una zapatilla. ¿Qué hacía el buen Ramón, encima de un vagón? ¿Qué hacía la sandía sobre la zapatilla? ¿Qué hacía el vagón? Corría por la vía."

    No me he vuelto loca, no. Aunque si sigo escuchando canciones infantiles, las conexiones neuronales me van a empezar a fallar. Afortunadamente mi hijo no entiende la letra, o eso espero. "La brujita Tapita vivía en un tapón, que no tenía puerta ni ventana ni balcón" Es que si a mi hijo se le ocurriera analizar la vida de la desdichada Tapita, no le quedarían ganas de seguir creciendo. De acuerdo que estamos en crisis, pero...¿vivir en un tapón? Hasta ahí podíamos llegar!!

    Entonces llega "El patio de mi casa"...que induce al satanismo: "A estirar, a estirar..que el demonio va a pasar". Pero bueno!!! Pobres niños. Y encima la protagonista es una niña que desde pequeñita se quedó coja...aunque tiene la maravillosa habilidad de disimularlo: "Desde pequeñita me quedé, algo resentida de este pie. Disimular que soy una cojita, disimular, lo disimulo bien".

   Para rematar el panorama, tenemos a los inocentes personajes de los dibujos animados. Mani Manitas y Dora Exploradora hablan intercalando inglés y castellano: "Venga Botas, let´s go. " "Amigo, pero tú estás crazy". Crazy van a volver a las pobres criaturas porque mi sobrina dice que lleva una falda blanca con una camiseta pink. Todo un logro el de los dibujos bilingües.

    "Una viborita larga y finita se pasea por mi balcón...lleva en el pelo una campanita....Es larga y finita como una bananita" A ver, ¿tiene contenido sexual o son imaginaciones mías? Lo que faltaba, mensajes subliminales.

    Lo peor de todo esto es que cada noche cuando me voy a la cama, resuenan incesantemente todas estas canciones en mi cabeza. Y yo me pregunto: ¿Estará mi niño tranquilo con todas esas letras absurdas en su subconsciente? ¿o se estará preguntando dónde están las llaves matarile rile rile?

sábado, 16 de julio de 2011

Yo sí me arrepiento

    Cuando era más joven, solía esgrimir muy orgullosa esta frase: "Yo no me arrepiento de nada de lo que he hecho, porque de todo se aprende". Solemne tontería.

    Me podría haber ahorrado alguna que otra hazaña absurda. Ahora que tengo un poco más de cordura, y que el corazón comienza a latirme con un cálido ritmo pausado, no me importa confesar mi arrepentimiento.

    Me arrepiento de haber provocado no sólo llanto, sino tristeza profunda. Me arrepiento de haber cedido tiempo a personas que sólo me dañaron. Me arrepiento de haber perturbado la paz de mi familia. Me arrepiento de no haber solucionado a tiempo problemas que se volvieron insufribles...

    Es evidente que aprendí, pero podía haberlo evitado, podía haber evitado el dolor ajeno y por eso me arrepiento. Es evidente que todos mis errores forman parte de lo que soy y que, sin ellos, jamás me hubiese convertido en la persona que hoy contemplo. Tampoco eso justifica las lágrimas derramadas que observé impasible.

   Al arrepentirme no me detengo. El arrepentimiento me hace más fuerte porque soy capaz de mirar hacia atrás sin temblar. Con el paso de los años sólo espero vestirme con la humildad suficiente para admitir que muchas cosas de las que hice no se pueden enmendar. No puedo cerrar grietas y tengo que ser capaz de aceptarlo.

    Quizá un día entienda que la vida es bella con sus grietas, sus abismos, sus rasguños. Y que en ese paisaje vital alejado del locus amoenus, sí tiene cabida el arrepentimiento.

domingo, 10 de julio de 2011

El mito de las lentejas

    En nuestro suelo cultural se encuentran la mitología griega, la germánica, la escandinava, la hindú...y, sobre todas ellas, la mitología materna.

    ¿Que cuál es la mitología materna? Muy fácil. Son todas esas frases con las que hemos crecido, esas frases que nuestras madres nos han ofrecido como universales. Nada más lejos de la realidad.

    "Lentejas, comida de viejas, si quieres las comes y si no, las dejas" Mentira!!!! Mentira!!!! Te las tenías que comer: el mito de las lentejas ya no cuela.
     ¿Y el de la sopa ?: "Cómete la sopa, hija, que no quema". Todavía siento el dolor en el velo del paladar, creo que incluso me llegaron a desaparecer algunas papilas gustativas.   
    Creí en el mito de los lácteos sin dudarlo. No llego al metro sesenta y yo venga a beber vasos de leche. Quizá es que a lo que se refería mi madre es que tenía que haber bebido unos diez litros diarios. No sé.

    "Como te portes mal este año, los Reyes Magos te van a traer carbón" Y tú soñando con un enorme trozo de piedra negra cada vez que se te ocurría hacer alguna trastada.

    "Un día, como me hartéis, hago las maletas y no me volvéis a ver el pelo" Pero...¿qué maletas ni maletas? Yo cada vez que volvía del colegio allí estaba mi madre echándome la bronca por no colgar unos pantalones.

    Porque, esa es otra, ¿dónde se compran ese libro de frases las madres?: "Pero, qué os habéis creído, ¿que esto es un hotel?".  Pues ya me hubiese gustado a mí, ya, pero uno de los de "todo incluído", con pulserita. Aunque no me imagino yo a mi madre preparando un desayuno tipo buffet, con un flexible margen de horario y una oferta extensa de actividades.

     Entonces llegó la frase maestra, que duraba todo el verano: "Tienes que esperar dos horas para hacer la digestión antes de volver a bañarte" Y uno se derretía y se desesperaba preguntando si ya habían transcurrido esas dos interminables horas. Veías al fondo el agua de la piscina o del mar...y  no te atrevías ni a meter un pie por si acaso te daba un corte de digestión mortal.

    Y no quiero terminar sin mencionar a una figura mitológica fundamental: el hombre del saco. ¿Quién es el hombre del saco? ¿Qué quería? Y lo más importante, ¿qué llevaba en el saco?. Quizá llevaba lentejas, yogures y sopa ardiendo. El caso es que tu madre te amenazaba: "Vete a dormir ya, que si no, vendrá el hombre del saco". Y yo, dirigía mis pasos titubeantes por el pasillo pensando que allí, al doblar la esquina para entrar en mi habitación podría esconderse el maldito hombre ese.

   Con el tiempo, lo que eran verdades incuestionables, descubres que son pura mitogía. Pero...¿no son básicos los mitos?. Están tan incrustados en nuestra cultura que se transmiten de generación en generación. Y ahora mismo me gustan tanto las lentejas que no me importa en absoluto que mi madre tratase de engañarme haciéndome creer que había otra opción.
   

 

viernes, 8 de julio de 2011

Seamos genios!!!!

    ¿Sufrir es condición inexcusable e inherente al genio?

    Pienso en Vincent Van Gogh. Pienso en su noche estrellada, plagada de lágrimas y de alaridos. Casi oigo el rechinar de sus dientes, el crugir de sus resortes más internos. Observo su pincelada vibrante e imagino sus manos temblando al son de su locura. Tan ingente y tan pequeño......

    Me viene a la cabeza Dalí, que encontró en el sexo una vía de escape. La paradoja del artista que logra la felicidad ajena a costa de su eterna búsqueda. Mundo onírico, horizonte irracional, burbuja incoherente..........

     Retumban en mi mente los nombres de genios anónimos. Personas que yo considero extraordinarias, cuya excepcionalidad no les permite ser felices. Un ascenso sin cima, una novela sin argumento.................

    Todos deberíamos dibujar nuestra propia noche estrellada al menos una vez en la vida. Y cortarnos una oreja...¿por qué no? (Aunque parece ser que fue Gauguin).
    Enrosquemos nuestros bigotes, traicionemos a Gala, seamos elefantes de patas imposibles!!! Pero, por favor, dejemos fluír el genio que nos desordena, sin miedo a los límites, sin miedo a las convenciones, sin miedo al sufrimiento.

    
Starry, starry night.
Flaming flowers that brightly blaze,
Swirling clouds in violet haze,
Reflect in Vincent's eyes of china blue.
Colors changing hue, morning field of amber grain,
Weathered faces lined in pain,
Are soothed beneath the artist's loving hand.

Now I understand what you tried to say to me,
How you suffered for your sanity,
How you tried to set them free.
They would not listen, they did not know how.
Perhaps they'll listen now.

For they could not love you,
But still your love was true.
And when no hope was left in sight
On that starry, starry night,
You took your life, as lovers often do.
But I could have told you, Vincent,
This world was never meant for one
As beautiful as you.


      Don McLean, Starry Starry Night.


    Hagamos de éste, nuestro mundo,un refugio cálido para los genios.




jueves, 7 de julio de 2011

Cualquier tiempo pasado fue mejor?

    Cuando veo fotos mías con 16 ó 18 años, me entra la risa floja. Arrugas no tendría pero llevaba unas hombreras que parecía un jugador profesional de rugby. Por no hablar del tupé...pero ¿quién me dijo a mí que me quedaba bien? Pues supongo que el resto de chicas de mi clase, que también lo llevaban. ¿Y los pantalones pesqueros? Parecíamos las hermanas pequeñas que heredan la ropa de sus hermanos mayores. Y yo, personalmente, no tengo excusa porque soy la primogénita.

    Pero lo peor no era la ropa, no. Recuerdo que cantaba Mecano con un sentimiento exagerado: " Hijo de la lunaaaaaaaaaaaaa!!!!! Gitano al creerse deshonrado, se fue a su mujer cuchillo en mano" ¿ Y qué tenía que ver esa letra con lo que yo estaba viviendo? Pues nada en absoluto, pero a mí...me llegaba "mu hondo". Y me miraba en el espejo mientras entonaba: "Y no quiero ver...tus ojos de hielo, llorar" ¿Tus ojos de hielo? En fin... Además, en cuestión de gustos musicales, una era plurilingüe: "Last Christmas I gave you my heart...." El bueno de George Michael contoneándose de aquí para allá y yo sin sospechar ni un segundo que aquel hombretón era gay. Ahora que, pasados los años, se me ocurre ver el video de "Careless Whispers", no entiendo cómo fue una revolución la confesión de su homosexualidad. Os invito a que veais el video de esta canción en youtube...¿de verdad hubo que esperar al escándalo de los baños públicos?.

    Y siguen los desatinos. Estaba enganchadita a "Sensación de vivir". Me tragaba capítulo a capítulo los problemones de esos niños pijos. Sí, sí, problemones. No me diréis que no es un problemón haberte mudado desde Minessota a Beverly Hills. Qué horror!!! Y, claro, a mí me gustaba Dylan, que no se quitaba la cazadora de cuero ni para dormir, daba igual la estación del año en que se encontraran.

    Veía Eurovisión con una emoción palpitante. Claro, no participaban Estonia, Letonia, Lituania y demás familia. Aquello sí era un concurso serio y no lo de ahora. Ese Sergio Dalma: "Bailar pegados es bailar igual que baila el mar con los delfineeeeeeeees". Todo un poeta el tío.

    Llevaba a Axl Rose en la carpeta, pertrechado con unas botas militares y una falda escocesa.Y me creía super mega heavy metal al ritmo de "Sweet Child of Mine".

    Al margen de todo esto, me impresiona mucho cómo he cambiado. No sólo me quité los calcetines de rombos, y las doscientas horquillas del pelo. Me quité la tontería, el pensamiento radical, los prejuicios, los clichés....y descubrí un mundo más allá de mis hombreras.

    Pero me produce ternura observar mis propios ojos cargados de ilusión, de inocencia...Entonces no sabía que unos años más tarde Axl Rose iba a ser pasto de su ego, que Azerbaijan iba a ganar Eurovisión, que los Hombres G se convertirían en caricaturas de sí mismos...y que, afortunadamente, George Michael iba a ser libre de hacer lo que le placiera.

( Mira por donde aquí Dylan se había quitado la cazadora.....)


 

domingo, 3 de julio de 2011

El maleficio de la mariposa

Doña Curiana y la Curiana Nigromántica.
 
DOÑA CURIANA. (Asomándose al prado)
¡Mañana clara y serena!
Ya rompe el primer albor. 


CURIANA NIGROMÁNTICA. (Con un cucurucho de estrellas y un manto de musgo seco.) Que Dios te bendiga, ¡oh vecina buena!

DOÑA CURIANA.
¿Dónde vais, señora, de rocío llena?



CURIANA NIGROMÁNTICA
Vengo de soñar que yo era una flor
Hundida en la hierba. 


DOÑA CURIANA.
¿Cómo soñáis eso? 


CURIANA NIGROMÁNTICA.
Sueño que las dulces gotas de rocío
Son labios de amores que me dejan besos
Y llenan de estrellas
Mi traje sombrío. 


DOÑA CURIANA. (Regañona.)
Mas pensad, señora, que por la poesía... 


CURIANA NIGROMÁNTICA. (Tristemente.)
¡Ay, doña Curiana, qué vais a decir! 


DONA CURIANA.
Pudierais coger una pulmonía
Que hiciera pedazos su sabiduría.
Tendríamos todas
Mucho que sentir. 


CURIANA NIGROMÁNTICA.
Mi alma tiene gran tristeza, ¡vecina!
Me dijo ayer tarde una golondrina:
«Todas las estrellas se van a apagar».
Dios está dormido, y en el encinar
Vi una estrella roja toda temblorosa
Que se deshojaba como enorme rosa.
La vi perecer
Y sentí caer
En mi corazón
Un anochecer
. «Amigas cigarras, grité, ¿veis las estrellas?
«Un hada se ha muerto», respondieron ellas
Fui junto a los troncos del vicio encinar
Y vi muerta el hada del campo y del mar. 


DOÑA CURIANA.
¿Quién la mataría? 


CURIANA NIGROMÁNTICA
La mató el amor

DOÑA CURIANA
Mirad cómo quiebra el primer albor. 


    El maleficio de la mariposa,  Federico García Lorca.

    El maleficio de la mariposa es la primera obra dramática de Lorca. Estrenada en 1920, supone un tanteo del autor en busca de una personalidad definida. NI la respuesta del público, ni la fría acogida de la crítica, presagiaban el nacimiento de un gran genio teatral. Y, sin embargo, eso era precisamente lo que estaba ocurriendo.
    La trama, delicada y sentimental, es la historia del curianito que se enamora locamente de una mariposa, cuyo atractivo es maléfico. Su pasión, no podrá ser correspondida jamás.

  

  
Cuando esta obra cayó en mis manos no podía creer que el mismo Lorca que había creado al imponente personaje de Bernarda Alba o Mariana Pineda, hubiese llevado a escena a un grupo de insectos. Sin embargo ya subyacía esa grandeza suya que consigue intensificar la vida cotidiana. Y en esta pieza revela las preocupaciones y aspiraciones profundas del ser humano. Y todo ello, bajo las altas hierbas de un prado.
  El maleficio de Lorca no es exclusivamente su condición homosexual, que tanto lo limita ante los críticos. Esta obra abre otra perspectiva más amplia, la de la condena a la que nos vemos sometidos por perseguir la poesía de la vida. ¿Merece la pena morir por creer en la belleza y entregarnos a ella?.

sábado, 2 de julio de 2011

Dolor de espalda

    Hay que tener cuidado con ciertas frases que parecen inocentes. Y no digamos con algunos piropos que son en realidad un arma de doble filo.

    Aparece alguien que, con una sonrisa de oreja a oreja y un tono de voz exaltado, te dice: "Qué guapa estás, has adelgazado, ¿verdad?". A ver por dónde cogemos eso. Porque es evidente que tal afirmación implica no sólo que antes estabas gorda sino que además esos kilos de más no te favorecían. Y ojo también si,por el contrario, te sueltan: "Qué bien te han venido esos kilitos que has cogido". Un modo muy elegante de decirte que has engordado, pero que muy elegante.

     Y lo peor viene cuando tienes un hijo porque entonces se convierte en la excusa perfecta para que te lancen dagas sin pudor. "Uy que niño más guapo, es clavado al padre". Y yo que soy la madre, entiendo que menos mal que mis genes estaban de vacaciones el día que lo concebimos. Pero el comentario puede ser más incisivo todavía: "Y este niño tan listo...¿a quién ha salido?" Porque está claro que en el caso de la inteligencia...los padres no tenemos nada que ver en absoluto.

    Entonces te vas a casa y te sientas en el sofá con un dolor de espalda horrible. Y crees que es de lo duro que ha sido el día hoy, pero no, qué va. Son las puñaladas que llevas clavadas.

    A pesar de todo te vas a la cama y duermes a pierna suelta tus ocho horitas. Al día siguiente tu vecina: "Uy qué mala cara tienes hoy, no has dormido bien, ¿verdad?". Ya desde por la mañana, entiendes que tus ojeras son de fábrica y que  ya te han clavado el primer puñalito del día.

     A veces el dardo está tan envenenado que no sabes por dónde escapar. "No aparentas tu edad, aparentas como yo más o menos" Y entonces escudriñas a quien tienes enfrente y piensas: "casi prefiero aparentar la edad que tengo, ni más ni menos".

    Y así estamos. Como es practicamente imposible esquivar las llamaradas, a veces te vas chamuscado a casa, pero a estas alturas de mi vida, todos estos comentarios, me hacen reír......

viernes, 1 de julio de 2011

Ciertos días

    De repente un día te levantas con un nudo en el estómago. Apenas puedes respirar y el sol te oprime tanto que vuelven ciertos fantasmas del pasado.

    Es entonces cuando sujeto con fuerza mi cabeza y agito mis pensamientos. No dejo que tintineen.

    Recuerdo con dureza que un día la ansiedad se adueñó de mis días y de mi perspectiva. Logré, sangrando mis sueños, desterrarla en un viaje apocalíptico y prometí no atender jamás sus súplicas.

    Y hoy, sin más, atisbo su sombra y me pesan los ojos. Mañana será otro día y sé que no existen ni las causas ni los desatinos. Sé que el desasosiego, visitante pasajero, no encuentra ya anfitrión en mis huesos. Me retiro agotada....pero no vencida.


   

miércoles, 22 de junio de 2011

Stop!!!!!!!!!!!!!

    Hay un juego al que yo llamaba "Stop" y que ahora llaman "Tutifruti", que es ideal para pasar el rato, o eso creía yo. Jugando con unos niños de ocho y nueve años extraje interesantes conclusiones; algunas, me hicieron reír, otras...no tanto.

    Resulta que con la letra S, tenemos el color Sombra, el color Serrín y el color Semáforo (que engloba tres, claro está ); con la letra P, tenemos el color Pistón y el color Polipiedra   ( ahí uno no se pilla los dedos, porque no es el color de una piedra, no, es el color de varias ); y con la L, el color Lamprea ( ese color es de nivel avanzado, vaya).
    El caso es que esta gama cromática singular me provocó más de una carcajada, e incluso ternura por el convencimiento inocente de los niños.

    Lo que no me provocó ni risa ni ternura fue la competitividad con la que se enfrentaban al juego. Parecía un duelo a muerte, hasta tal punto que a uno se le saltaban las lágrimas porque sí valía el color Teja y no el color Tomate. ¡Habrase visto!. El dichoso Tutifruti se convirtió en un enfrentamiento personal. Yo estaba perpleja ante la intransigencia de los unos para con los otros.

    Menos mal que cuando terminó el combate la que sumaba los puntos era yo; así que me las arreglé para que todos, punto arriba, punto abajo, obtuvieran lo mismo. Aquello fue el acabose: miradas de rabia, empujones....

    Algo debemos estar haciendo mal con nuestros pequeños. Se están convirtiendo en el espejo de las frustraciones de sus padres. Cuando son bebés, tienen que rebasar al vecino en al menos un centímetro ; y pesar de doscientos gramos a medio kilo más. Eso sí, pasados los cinco, ni un gramo de más en esos cuerpecillos. ¡Qué horror!

    Luego llegan las notas. Si tu primo ha sacado un seis, saca un seis y medio o ni se te ocurra aparecer por casa. ¿Que Luisito va a judo? Pues tú a judo y a informática. ¿Que también va a Inglés? Pues directo a clases de Inglés y de Chino tibetano, que es muy necesario en los tiempos que corren.

    A un niño se le tiene que dar bien por narices el deporte, la música, cualquier tipo de actividad creativa....son una especie de superhéroes polifacéticos. Ellos no pueden ni con los pies, pero, tranquilos, ya están los padres para comprarles unos zapatos mejores que los de su compañero de pupitre. Con esos vuelan de una actividad a otra.

    Estos extenuados infantes se muestran ansiosos a lo largo del día. No digo yo, con esa agenda que ni un ministro. Pero entonces llega lo mejor:"¡Este niño es hiperactivo!"." Este niño no se concentra, tiene déficit de atención".

    Pero bueno!!!! Pero, ¿y cómo se van a concentrar? ¿cómo no van a parecer un amasijo de nervios?. El caso es que se busca al hijo perfecto, y esa perfección es directamente proporcional a lo que los padres no pudieron conseguir.

    Me horroriza ver el daño que infligen algunos progenitores sobre sus hijos, pero prefiero pensar que es de manera inconsciente. Si no es así, ya podemos ir aceptando los colores Sombra, Polipiedra o Lamprea, o nos tendremos que ver las caras con sus padres.

    "Hola, buenas tardes, quiero unos pantalones color Pistón" ¿Que no sabe lo que es? ¡¡¡¡Pues ahora mismo se lo digo a mi padre, idiota!!!!.

martes, 21 de junio de 2011

Gracias

El amor infantil sigue al principio: "Amo porque me aman". El amor maduro obedece al principio: "Me aman porque amo". El amor inmaduro dice: "Te amo porque te necesito". El amor maduro dice: "Te necesito porque te amo".
    
     El Arte de Amar, Erich Fromm.

     Soy de las que opinan que hablar del amor lo desgasta: "¿Por qué me quieres, cariño?"."¿Estás igual de enamorado que al principio?".  "¿Pero me quieres más o menos que antes?".
    Me horroriza que se intente medir el amor, cuantificarlo, verterlo en un tubo de ensayo y analizarlo continuamente en un laboratorio. Desvirtuamos el amor si lo limitamos.
    Demasiadas veces somos agresivos con aquel al que amamos: "No puedo vivir sin ti". Es un precio demasiado alto. Parecemos querernos más a nosotros mismos al decir esta frase. Nos amamos tanto que pensamos en cómo sería nuestra vida sin el otro. Egocentrismo disfrazado de amor in extremis.
   
    La parte más triste: dejarse querer. Quizá ésa sea la muestra más evidente de no amar en absoluto a tu pareja. Aprisionas su amor, no lo dejas ir. Narcisismo disfrazado de rutina. Es ese amor infantil del que habla Fromm: "amo porque me aman".... Y suenan campanadas lejanas el Día de los Difuntos..... 

    Sólo los valientes gritan sin atisbo de temblor en su voz: "Si no eres feliz conmigo, busca tu felicidad con otra persona". Aún sintiéndose enamorados, esbozan el último suspiro y dejan al amado partir...lejos...sin obligarles a entonar el mea culpa. Sólo un amor real es capaz de observar el momento agónico de la despedida y no regalar lágrimas al tiempo. Es el amor sin máscaras, exento de atrezzo.

       Y un día, cuando la niebla parece cubrirlo todo, sientes que no necesitas hablar más del amor. Un día, de repente, dejas de leer a Fromm. Colocas cuidadosamente el libro en la estantería y te giras para acunarte en los brazos de tu amado. En ese regazo, te sientes protegido, a veces desquiciado, apoteósico, desvalido, calmado...dichoso. Pero es tu regazo, el tuyo. Y no tiene forma, ni tamaño, ni color, ni medida..... Ni siquiera tiene tacto...............
 

domingo, 19 de junio de 2011

La paella más importante de la historia

    Me he pasado una parte de la mañana preparando el puré a mi hijo con el mismo mimo de siempre. Unas patatitas por aquí, unas judías verdes por allá, calabaza que le endulce un poco, puerro que le da sabor...Y pescado, que hoy le tocaba pescadito al niño.

    Ya casi había claudicado en el intento de que masticara. Desde que cumplió "un año", llevo intentando que mastique. Por fin!!, ahora que tiene un año ya no tendrá que comer puré todos los días. Sí, sí, sí, sí, que me lo había creído yo eso. Le acercaba un pedacito de jamón york previamente desmenuzado y parecía que le acercaba cianuro. Al final, como es un santo, se comía media loncha pero gustarle lo que se dice gustarle, no, en absoluto.

    Otro día, con la misma paciencia, desmenuzaba pescado. Pufffff, después de media hora, me rendía y volvía al puré. Después de estas batallas absurdas entre la comida sólida y mi hijo, pensé que ya masticaría, que no iba a estar toda la vida así. No me imagino yo a Nico con sus amigos de pinchos por ahí y diciéndole al camarero: "Por favor, a mí las bravas y el jamoncito me lo bate".

    Hago un inciso para aclarar que mastica lo que le da la gana, a saber: patatas fritas,de bolsa y de las del burger; chaskys (que mira que son duros); por supuesto gusanitos; churros!!! poniéndose de grasa hasta las cejas. Vamos, que me toma el pelo.

   Y a lo que iba. Hoy preparo su purecito, y paella para nosotros. Cuando me doy cuenta, mi querido hijo, el de la ley del mínimo esfuerzo, mete la mano en la paella y empieza a saborear como si fuese jamón de bellota. Sin dudarlo, he desterrado al puré y le he plantado un plato de paella. Que se lo ha comido!!!! Que se lo ha comido!!!!

   Para mí, ésta ha sido la paella más importante de la historia y Nicolás me ha vuelto a demostrar que, por mucho que yo me empeñe, el ritmo lo marca él, que para eso tiene 14 meses, hombre!!!.

    Añado que se ha ido a dormir la siesta amarillo, de pies a cabeza. ¿Y qué importa? Ha comido paella!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

sábado, 18 de junio de 2011

Un silencio que ahoga

    El grito más desgarrador es el que no se oye. Es un grito tan incandescente que te hiela la carne. La sonrisa mutilada, la mirada errante, el corazón desamparado.

   Munch, marcado por una infancia dura, vivió en una esfera difusa entre la cordura y la paranoia. La rigidez de su padre le hizo sufrir una incomprensión que se grabó a fuego en sus entrañas.

    La incomprensión, la falta de cariño, el desasosiego, la búsqueda inútil y desesperada. Se convierten en carcoma que van alterando el ritmo cardiaco. Al principio, de manera sutil. Más tarde, el corazón se ha cercenado tanto que ya apenas retumba.

    "Quitarse la vida es de cobardes". Malditas frases hechas!!! Malditas frases que generalizan y hacen universal algo tan críptico. Un corazón de ritmo tierno ha dejado de latir definitivamente, ha dejado de suspirar en el vacío. Y nadie podrá tildar de cobarde a un alma excepcional, distinguida, a la que no supieron comprender en vida.

   Su grito silencioso deja tras de sí un halo de cordura mayor del que hubiese imaginado. Ahora que su corazón ha desconectado el latido, retumba con rabia, ensordece a todos y se aleja con una sonrisa quebrada.

    Vayas donde vayas, ya has vencido. A tu manera, pero has vencido. Donde estabas tú, quedará silencio, y tras el silencio, un grito eterno.

    Esto es tuyo, Andrea.

jueves, 16 de junio de 2011

Ahora me enfado y no respiro!

    La gente tiene derecho a enfadarse por lo que quiera, eso está claro. Partiendo de esa base, a veces no comparto la energía malgastada en la ira derrochada por motivos más que nimios.

    Por ejemplo, el otro día en youtube, leía perpleja como alguien descargaba toda su tormenta sobre las letras de las canciones de Ricky Martin. De acuerdo que el boricua no se caracteriza por la profundidad de sus temas ( absurdas del todo, sí, sí, sí... ). Pero yo prefiero reírme que malgastar mi adrenalina. Si no, que se lo digan a los "indignaos", que están ellos como para pensar en las letras de Ricky Martin.

    ¿Y la señora que se enzarza en una discusión de más de diez minutos porque alguien se le ha colado en la cola de la frutería? Bueno...se le olvida hasta que los plátanos han subido una barbaridad. Eso no importa. Se desgasta por dentro y por fuera mostrando su indignación a la aprovechada. Porque eso sí que es ser aprovechada y no Camps con sus trajes.





    Y yo con estos pelos!!!! Los niños contemplan atónitos como sus mayores se transforman en Mr.Hyde a la mínima de cambio: décimas de segundo de más en un semáforo ya en verde, un penalty mal pitado, la lluvia, que no queden yogures de tu sabor favorito...es más, que no queden yogures en absoluto. Son auténticos dramas que provocan que la gente pierda los nervios con una desmesura atronadora.

    ¿De verdad merece la pena? Creo que no se canaliza bien el malestar. Porque mientras una señora vuelve a casa sudorosa porque en las rebajas le han quitado el único vestido de su talla que quedaba, los políticos campan a sus anchas por el maravilloso mundo del engaño descarado.

    Panem et circenses. Pasen y vean señores, pasen y vean!!!

martes, 14 de junio de 2011

El traje de buzo

-Cuando alguien busca-dijo Siddhartha-,suele ocurrir que sus ojos sólo ven aquello que anda buscando,y ya no logra encontrar nada ni se vuelve receptivo a nada porque sólo piensa en lo que busca,porque tiene un objetivo y se halla poseído por él. Buscar significa tener un objetivo.Pero encontrar significa ser libre,estar abierto,carecer de objetivos.

    Siddhartha, Hermann Hesse


Hace un par de días, Marta dejó de lado todos sus objetivos. Creo que se sentía agotada de disparar al centro de la diana una y otra vez. 
Y se fue...No se propuso nada, y se fue...

Al volver, tomó las últimas decisiones para poder sentirse libre. Desplegó sus alas y vio que colgaban algunos jirones pero, por primera vez, no le importó. De cualquier modo, eran sus alas y le llevarían donde necesitaba ir, al principio de todo.

Se había empeñado tanto en desenmarañar su día a día, que no se había permitido el lujo de observar con admiración el caos. Se había propuesto con tal ahínco encontrar los motivos, que no había reparado en el horizonte. Y estaba justo allí, frente a ella, más amenazante que nunca pero tan hermoso.........

Se miró en el espejo y el brillo de su mirada le hizo estremecerse con el poder de los que se consideran vulnerables. No tenía que ser perfecta, ni siquiera tenía que ser nada. Tan sólo discurrir, explotar, claudicar.

Cuando dejó de buscar, halló. El origen de todo estaba en el traje de buzo. No le estaba permitiendo sentir en su piel la belleza carnal del fondo marino. 



 

lunes, 13 de junio de 2011

Clementine

Cuando nos empeñamos en olvidar algo, comienza la obsesión y cobran fuerza inusitada los recuerdos. Quizá sea mejor dejar fluír la conciencia...o el subconsciente...porque planear el olvido implica aferrarte al recuerdo irremediablemente.

    Así le sucede a Joel en Olvídate de mí. Jim Carrey abandona su máscara hiperbólica, su flequillo histriónico, para convertirse en un personaje dramático envuelto en una sutileza fantástica. Por no hablar de Kate Winslet, que podía haberse ahorrado su crucero en el Titanic pata embarcarse tan sólo en esta historia de magia cotidiana.

    Cuando Joel descubre que Clementine ha hecho borrar los recuerdos de su amor, decide hacer lo mismo. Será entonces cuando caiga en la cuenta de la dimensión de su pasión, de todos los momentos que podía haber aprovechado y no lo hizo, de las miradas que negó a Clementine....

 Porque Clementine es un alma excepcional. Que decide entregarse al olvido porque la pasión se ha ido diluyendo y no lo soporta. Poque podría continuar con esa relación anodina pero es tan pesada la carga...

    Muchas veces dejamos que sea el ritmo de los acontecimientos quien decida por nosotros. Necesitamos una excusa, una justificación para enfrentarnos a nosotros mismos. La falta de latido, la mirada cansada casi yerta, la aspereza al respirar...deberían ser suficientes.
  
    No deseo tocar el cielo con las manos. Sólo quiero acunar la sensación de hacerlo, pero cuanto más lejano observo el cielo, más serena me encuentro. El día que ese azul opaca mis sentidos, no espero más. Ese día trunco mi trayectoria.


Yo lo noto: cómo me voy volviendo
menos cierto, confuso,
disolviéndome en el aire
cotidiano, burdo
jirón de mí, deshilachado
y roto por los puños
Yo comprendo: he vivido
un año más, y eso es muy duro.
¡Mover el corazón todos los días
casi cien veces por minuto!

Para vivir un año es necesario
morirse muchas veces mucho.

Cumpleaños, Ángel González. 

      

domingo, 12 de junio de 2011

Adoro y detesto

   ADORO:

   La lluvia y el olor de todo tras su paso; los calcetines de colores; la tortilla de patata; la inocencia de los niños; el brillo de ojos de una mirada sincera; la cerveza fresquita; la sensación de la brisa sobre la piel; bailar; el mar y el sonido de las olas; el crepitar del fuego en una chimenea; los atardeceres; los pantalones vaqueros y las zapatillas de deporte; la sonrisa de la gente, sobre todo, al comenzar el día; las vistas que observo desde la ventana de mi habitación; viajar sin esquemas ; ducharme tras un día agotador; ser contradictoria; quedarme pensando en algo y perder la noción del tiempo; las croquetas de mi madre; acurrucarme bajo el edredón cuando hace frío; la risa de mi hijo....de él adoro todo; pisar la arena de la playa con los pies descalzos; andar descalza por mi casa; el cus-cús que me prepara Manuel...y todos sus detalles; reírme a carcajadas; las tapas y los pinchos; las amapolas y las margaritas; los delfines en libertad........


    DETESTO: (y aunque detesto, respeto...excepto la injusticia; para ella no hay respeto)
   Las puntillas y los encajes; los tacones y el maquillaje ; las judías verdes con aceite y vinagre; los cotilleos y la gente cotilla; el bullicio y las aglomeraciones ; conducir; los camisones; la gente retorcida y que siempre está a la defensiva; que no respeten mi intimidad; el calor excesivo; el pelo recién peinado de peluquería; los secadores; la injusticia y la impotencia que siento ante ella; los pantys y la ropa excesivamente ajustada; las arañas; el olor a sudor; la prepotencia; planchar; los masajes y las cosquillitas; el reggaeton; que se me olviden las cosas; los compromisos sociales; los abrigos de piel; el olor a gasolina; el mal aliento; que griten al hablar; las películas de terror; que Belén Esteban se haya convertido en una especie de insignia nacional; el hígado, la lengua, las manitas de cerdo; ......

viernes, 10 de junio de 2011

He cruzado océanos de tiempo para encontrarte......

Cumpleaños de Laura

    Hoy es el cumpleaños de Laura. Hace 34 años que llegó a casa en brazos de mi madre mientras mi hermano y yo observábamos un tanto decepcionados. Resulta que mi madre llevaba varios días sin estar en casa y ahora llegaba con un bebé ....vaya!!

    Pero se nos pasó pronto el disgusto. Nos tomamos tan en serio lo de ser hermanos mayores que un día, incluso la sacamos del cochecito y nos sentamos en el sofá con ella. Yo la sujetaba en mi regazo (con cuatro años) y mi hermano (tres), que hacía las veces de padre de familia, la miraba con orgullo.

    Ahora que lo pienso la llamábamos "bicho", "hipopótamo culón"...y eso que tiene un tipazo de infarto. Pero sobrevivió a nuestros apodos infantiles y nosotros sobrevivimos a esa vena que se le cruzaba. Cuando Laura se mordía el labio inferior con fuerza era mejor poner pies en polvorosa.

    Era una niña preciosa, y lo sigue siendo. Rubia, ojos azules verdosos o verde azulados y unas orejas con unos genes a prueba de bomba. A mí sus orejas siempre me han parecido graciosas pero a ella no le hacen ninguna gracia, y mucho menos ahora que se las ha dado en herencia a sus dos hijas. Qué sé yo...a mí me parecen una monada.

    Y a sus 34 años ella dice que ya ha vivido muchas cosas y las que le quedan por vivir....Se merece lo mejor porque es una gran persona y ha construido un rincón en el mundo muy especial.

    Yo espero seguir compartiendo con ella cada día, porque me encanta mi hermana. No me paro demasiado a pensarlo pero me encanta cómo es. Su ironía, su sensibilidad, su integridad, su entrega, su inocencia....incluso me encanta su genio, me produce mucha ternura. Ufff, debo estar haciéndome mayor.

    Feliz cumpleaños, "bicho".

jueves, 2 de junio de 2011

De mayor quiero ser...

    Hace ya unos días, le pregunté a un niño de siete años: "Oye, Jorge, ¿tú qué quieres ser de mayor? ". He de reconocer que la pregunta original no era, pero sí lo fue la respuesta.

    El niño, con los ojos como platos y con una naturalidad pasmosa, me contestó: "Los lunes, pintor; los martes, profesor; los miércoles, futbolista; los jueves, no lo sé; y los viernes, veterinario. "

    Toma ya!! No me habían dado una mejor respuesta en mi vida. Además, para tener siete años, lo tenía bastante claro; sólo dudaba los jueves y  tenía clarísimo que los sábados y los domingos no se trabaja.

    ¿Os imaginais que cada día trabajáramos en algo diferente? Nos llamarían un lunes al móvil: "Hola doctor, ¿me puede dar cita para el mes que viene?". El martes haríamos la maleta y nos pondíamos el traje de azafata, o de piloto, o de militar de la legión. Eso sí, no íbamos a ganar para tanto uniforme. Llegaría el miércoles y nos encontraríamos subidos en un trapecio, puestos a elegir, del Circo del Sol. El jueves, como Jorge, no sé. Y el viernes, para rematar la semana con emociones fuertes, podríamos ser inspectores de Hacienda o Registradores de la Propiedad, qué se yo. Así cogeríamos el fin de semana con más ganas....

   Nunca estaríamos cansados de la rutina, no veríamos las mismas caras cada día y tendríamos jefes múltiples. Y si nos organizamos bien, se pueden hacer turnos rotativos, de manera que tu vecina te puede planchar el uniforme de azafata y tú haces lo propio con la bata de médico.

    La moraleja de todo este mundo laboral surrealista, es que deberíamos escuchar más a los niños. Su espontaneidad es más inteligente de lo que nos creemos. En el fondo de sus afirmaciones late el subconsciente humano. Ya lo dijo Nietzsche. Quizá nos fuera mucho mejor si hiciésemos más caso a los niños, total, en el Gobierno ya hay unos cuantos vestidos con traje y corbata..... Desgraciadamente estos niños sólo tienen un trabajo, el mismo todos los días: amargarnos el nuestro.



  

miércoles, 1 de junio de 2011

Malditos eclipses


    A lo largo de nuestra vida hemos visto algún eclipse. Pero también los hemos sufrido.

    Quién no se ha visto eclipsado por un hermano, un amigo o incluso un partido de fútbol? Sin ir más lejos, un partido "crucial" puede llegar a eclipsar a toda una crisis económica. De repente el país parece resurgir: todo el mundo unido, al son del waka-waka. Shakira y sus caderas eclipsando a las interminables listas del paro. Todo un fenómeno!
    El problema es que tras el eclipse, la luz del sol brilla con más fuerza y la realidad nos golpea sin pudor. Pero...y lo inconscientes que nos hemos sentido durante el eclipse? Que nos quiten lo bailao! (Como diría la otra).

    Si tienes la mala suerte de nacer un 25 de Diciembre, o un 6 de Enero...eso si que es un eclipse maldito, pero maldito de verdad. Cuando eres niño, no se multiplican los regalos, no. Al contrario...los padres aprovechan la coyuntura y ya no sabes si han venido los Reyes Magos, Papá Noel o tu tía la de Cuenca. Tienes regalos pero no tantos como si hubieses nacido un 21 de Enero, por ejemplo. ¿Y que culpa tengo yo?

    Luego están los eclipses literarios. El pobre Manuel, que tuvo un hermanísimo, Antonio. ¿Pero quién le mandaría a él escribir poesías? Si hubiese sabido que su hermano le iba a eclipsar, habría sido el Doctor Manuel Machado, y tan tranquilo. Pero no, le dio por escribir, y con bastante acierto...pero más acertado estuvo Antonio, así que se tuvo que conformar con aparecer en los libros de texto como " el hermano de...". Leonor, Castilla, Andalucía y Guiomar terminaron por oscurecerle del todo: eclipse total.

    Hay eclipses que duran tanto que uno pierde la noción del tiempo...ni siquiera te acuerdas cómo era todo antes del eclipse. La gripe A....sin comentarios.

    Y por fin, y por hacer mención a un eclipse muy reciente, Ortega Cano. El torero ingresado de gravedad, ha opacado la muerte de Carlos Parra, que, por cierto, si a alguien le interesa, era el hombre que conducía el otro coche. Por desgracia, no estuvo casado con Rocío Jurado así que nadie habla de él. Maldito eclipse.....

   

jueves, 26 de mayo de 2011

Sexo en Nueva York vs. Bob Esponja


    La primera vez que dieron Sexo en Nueva York ni se me pasó por la cabeza verlo, o no me cuadraba, o ni me di cuenta de que empezaba una nueva serie...ya ni me acuerdo.

    Ahora, por un capricho del destino, y porque te lo repiten hasta la saciedad, me he tragado ya demasiados capítulos. ¿Se supone que trata de mostrar la liberación de la mujer frente al sexo? Porque a mí me parece más bien todo lo contrario, a no ser que liberarse sea sinónimo de llevar cada día un modelito y decir frases ridículas y lapidarias al final de cada capítulo.

     Tengo que reconocer que me hace gracia, que a veces incluso suelto alguna carcajada. pero...si se supone que las cuatro protagonistas son el prototipo de algo, ya no me hace ni pizca de gracia.

     Lo más curioso del asunto es que para los americanos fue una especie de revolución en las pantallas. Dios mío!! Sexo explícito!! Si Lincoln levantara la cabeza.... Y a mi que me parece que es un retorno al Paleolítico, eso sí, sustituyendo los taparrabos por zapatos de marca.

    Hasta hace poco pensaba que el personaje más absurdo que había sobre nuestras pantallas era Bob Esponja pero ahora empiezo a dudar. Le han salido cuatro serias competidoras. Pero estas cuatro abanderadas del sexo sin tapujos no viven en una piña debajo del mar, ni mucho menos.

     Pero vamos, que tampoco pretendo lapidar a una serie que te hace olvidar la crisis, viendo tarjetas Visa volar de un lado para otro como si tal cosa. Muy fiel a la realidad, sí señor. Y como visto un capítulo, vistos todos, yo ya he visto más de los necesarios.

    Ahora que lo pienso, Carrie y compañía, comen sushi y beben Cosmopolitan. Y el pobre Bob Esponja venga a preparar Cangre Burger.....

lunes, 23 de mayo de 2011

Y cómo se me ocurre a mí crear un blog??

    Entro en Google, me busco y no me encuentro. Demasiado bonito para ser verdad...
    Y lo mejor de todo es que hay setecientas personas que tienen el mismo nombre de blog que yo. Y no sé cambiar el título.

    De aquí a una semana ya me veo, ya, bajando fotos, añadiendo fondos personales y no los que me ofrecen. Sí, sí, sí...ya me estoy viendo.

    De momento vamos a ver si hoy consigo dos objetivos básicos: cambiar el título de mi blog y que los demás lo puedan ver. Si lo consigo, me daré con un canto en los dientes.

    Mientras tanto, seguiré escribiendo para mí misma, que no está nada mal.

domingo, 22 de mayo de 2011

Cuando un dedo apunta al cielo, sólo el tonto mira el dedo.

Hoy, jornada electoral, decido crear un blog. Y por supuesto, no pienso hablar de política, ni mucho menos.

    La primera vez que vi Amelie quedé fascinada por los colores de la película, por el verde y el rojo en contraste. Quedé fascinada por Nino Quincampoix y las manos de Amelie buceando en las lentejas. Quedé fascinada por la amargura de los personajes, por los gnomos de jardín....

     Al cabo del tiempo caí en la cuenta de que mi fascinación no era exclusiva y me retiré. Se había puesto de moda que te gustase Amelie, los cuadros de Klimt y leer a Rushdie. Vaya hombre!! Y yo que me creía tan especial....

    Pero me compré el DVD de la película, incluso la banda sonora original, unas chapas... Pintaba mal. Me estaba convirtiendo en una friki. Y lo peor estaba por llegar: me aprendí las frases de la película!! Al menos no me dio por cortarme el pelo como Audrey Tautou, hubiese parecido una escarola porque yo tengo el pelo rizado.
    Con unos añitos más, y las hormonas juveniles empezando a peinar canas, Amelie quedó en una estantería al lado de Antonia y de Olvídate de mí. Las chapas? Las perdí. Vaya friki de pacotilla!

    Pero sigo recordando las frases...tanto...que mi blog decide mirar al cielo, siempre al cielo, nunca al dedo de quien apunta, sea quien sea.